LA MÚSICA Y SU HISTORIA
En un principio la música que los hombres creaban eran imitaciones de sonidos de la naturaleza y de los animales, para crearlos utilizaban objetos rudimentarios como huesos y troncos. La música era un ritual para el apareamiento, la caza, o una guerra. Para el hombre los símbolos de la vida eran el sonido y el movimiento. Con esto podía diferenciar lo inerte de aquello que tiene vida.
No hay testimonios directos de la actividad musical en tiempos prehistóricos, aunque sí restos de herramientas e instrumentos que pudieron tener una aplicación musical.
Cada tribu o etnia humana supo aprovechar su propia industria y saber crear un estilo musical.
La música nace de la necesidad de protegerse de ciertos fenómenos naturales, de alejar los espíritus malignos, de atraer la ayuda de los dioses, de honrarlos, festejar sus cazas, fiestas y celebrar el cambio de las estaciones.
Los primeros instrumentos fueron los objetos o utensilios o el mismo cuerpo del hombre que podían producir sonidos.
Los diferentes instrumentos musicales primitivos están clasificados en:
Autofonos: Aquellos que producen sonidos por medio de la materia con la que estan construidos.
Membranofonos: Serie de instrumentos más sencillos que los construidos por el hombre, por ejemplo tambores hechos con una membrana tirante sobre una nuez de coco, un recipiente cualquiera o una verdadera y autentica caja de resonancia.
Aerofobos: El sonido se origina en ellos por vibraciones de una columna de aire.
Los instrumentos musicales fueron:
Los arcos que disparaban flechas en la caza, servían de arpas primitivas para celebrar la vuelta de los cazadores al poblado.
Los restos del cuero de la caza que no se usaban en la confección de prendas de vestir, se utilizaban para forrar la boca de vasijas o un tronco hueco, formando un tambor primitivo.
Los arcos que disparaban flechas en la caza, servían de arpas primitivas para celebrar la vuelta de los cazadores al poblado.
Los restos del cuero de la caza que no se usaban en la confección de prendas de vestir, se utilizaban para forrar la boca de vasijas o un tronco hueco, formando un tambor primitivo.
Los huesos de los animales cazados se usaban como agujas y estiletes, pero también como pequeñas flautas de hueso.
Silbatos de hueso
Conchas marinas que suenan como trompetas.
Teclados de piedras percutidas (litófonos)
NUESTROS INSTRUMENTOS PRIMITIVOS EN PUERTO RICO
tambores
instrumentos de viento como el fotuto con el caracol del carrucho
guiro
flautas y pitos de maderas o hueso
guitarra ( el cuatro)
palitos de madera
maracas
panderetas
Los niños producen su propia música de una manera improvisada y espontánea. Esto en referencia a que ciertos sonidos, que forman parte de nuestra cultura puertorriqueña, estimulan ciertas emociones. Se tiende a utilizar en la etapa de caldeamiento con el propósito de liberar tensiones, establecer empatía, para estimular al diàlogo, espontaneidad, para emerger deseos conscientes e inconscientes, un motivador para los niños.
Por otro lado el niño tendrá una forma de expresar sus emociones, siendo su práctica un factor protector y fortalecedor de su identidad. Es decir la autoexpresión emocional, entre ellas el ejercicio de música (de manera activa o pasiva) es de valor muy especial, ya que los niños son simbólicos y por lo general les es más sencillo expresar sus confusiones y sufrimientos en forma musical u otro tipo de arte, para luego poder asimilarlo y luego pasar a otra fase de carácter verbal donde pueden enfrentar mejor, es decir, entender sus problema o exponerlos de manera más directa.
Por otro lado el niño tendrá una forma de expresar sus emociones, siendo su práctica un factor protector y fortalecedor de su identidad. Es decir la autoexpresión emocional, entre ellas el ejercicio de música (de manera activa o pasiva) es de valor muy especial, ya que los niños son simbólicos y por lo general les es más sencillo expresar sus confusiones y sufrimientos en forma musical u otro tipo de arte, para luego poder asimilarlo y luego pasar a otra fase de carácter verbal donde pueden enfrentar mejor, es decir, entender sus problema o exponerlos de manera más directa.
Entonces existe una manera activa (tocando un instrumento musical) que genera una suerte de auto organización interna (Fisiológica y psicológica) y además existe otra forma pasiva (oyendo la música) que genera un ordenamiento interno de las pulsiones interiores, ayudando a la mente a entrar en sintonía con el presente, autorregulando diversas funciones psicofisiológicas, percibiéndose un estado de mayor armonía y/o conciencia de sí.
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